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viernes, enero 06, 2017

Fragmentos quebrados, la tristeza no tiene tiempo, sin embargo el futuro debe aguardar con esperanza

La línea de la vida en una mano, lleva impresa diminutas ramas con invisibles huellas de decepciones. Cada huella es un fragmento quebrado, tan triste como una canción de Radiohead, con los ojos cerrados y los audífonos puestos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

fragmentos dispersos, líneas en la palma de la mano: no hay destinos, sino bajeles azotados por los vientos. Ramas desgajadas, hojas secas, abatidas por los vientos del otoño que alocadas discurren sobre los embaldosados suelos de la ciudad. Yo, reivindico la tristeza en cada texto, y me ensombrezco mientras "Creep" resuena, pero el ensombrecimiento tiene algo..., un matiz de ternura melancólica que acompaña la soledad quebrada. Los ojos cerrados, los finales felices... ¿volverías a empezar? Mientras cae la noche, silenciosa tras las ventanas, crece el murmullo de la voz interior, como un monólogo de Virginia, como un relato de Frederik Pohl. No hay soledad..., hay desconocimiento, ausencia de comunicación, distancia... DIS TAN CIA

Anónimo dijo...


Nuestros dioses siguen su lucha
Qué fatales flores de la oscuridad
Florecen de semillas luminosas
(…)
Veamos con nuestros corazones
Esas cosas que han visto nuestros ojos, y
Conozcamos la verdad en la que todavía mentimos

Grateful Dead
Blues for Allah

Graciela Garza dijo...

Como un monólogo de Virginia... "Empiezo a desear un lenguaje parco como el que usan los amantes, palabras rotas, palabras quebradas, como el roce de las pisadas en la acera..."

Cuando escribí este fragmento escuchaba The Tourist de Radiohead, sentí como si una parte de mi ser quisiera despegarse y dejarse llevar por la melancolía de una voz que me llamaba, dejarse ir, como en un estado de levedad, pero la responsabilidad pesa más que cualquier allegado deseo, entonces, escribo...

Gracias Raúl Donato, por pasar y dejar tus palabras, realmente se agradecen!