Mirar al oriente es respirar distancia
sentir el anhelo de atravesar los cerros y volar
entre el azul de las piedras
y el gris de la carretera
Mirar al oriente es pensar en un abrazo
Un paisaje con molinos eólicos me dice que todo estará bien
Voy y regreso
Y lo que creí que no lograría lo resuelvo
a pasos
a respiros
a intentos
a logros
y a favor de nuevos vientos
Mi cielo azul, mi camino de hoy entre los cerros.
Blog de experiencias cotidianas. Te hablaré de libros, de cine, amor y desamor. Te hablaré de lo que hablamos todos.
Entradas populares
-
Raquel tiñe de azul las margaritas. Pretende reconstruir el mar de la pasión ahogando las flores en el agua. Daniel sumerge otros pétalos en...
-
-De qué me hablas -Deberías dejar de ser tan confiada, las ausencias están llenas de intenciones -Si me pongo a dudar voy a terminar siend...
-
No seremos los mismos el siguiente verano. Las películas que vimos serán historia. El espacio hoy vacío entre tus dientes estará ocupado y ...
-
Duerme en forma de S. Cuando despierta respira con profundidad, es una I erguida mirando por la ventana. Sale de casa. En la calle alguien s...
-
Corazones de lazos invisibles transitando ligeros en la brisa corazones con alma que sin prisa van en fuga sutiles e invencibles Afectos e...
-
El enamoramiento es una ola. Es dejarse envolver en el naufragio. Es despertar en la arena escuchando alejar la marea. El amor es un puerto....
-
El viento aleja Diez palabras para un sol Hoy apagado
-
Parece lento el viaje de las nubes, como la travesía del otoño en esta tarde. Pero el tiempo no perdona, cada gota de segundo es lacerante ...
-
Quebrada como el silencio como el rayo que ha quebrado nuestro cielo como el florero roto en la ventana que aún guarda una flor marchita...
2 comentarios:
Y entonces surge una pregunta interesante... ¿En quién piensas al mirar hacia el oriente?
Querida Kéllyta gracias por leer. Por trabajo vivo entre dos ciudades. Cuando camino desde la puerta de la oficina hacia el auto miro al oriente y pienso en mi hija. A veces creemos que la distancia nos roba y la ansiedad nos debilita, pero sólo el corazón sabe qué tan fuertes la distancia y la ansiedad nos pueden llegar a convertir.
Publicar un comentario